TRES EVIDENCIAS EN PERSONAS QUE MEDITAN
La Meditación es para algunos una actividad inherente a su diario vivir, pero lamentablemente para otros es un ámbito desconocido e incluso con tintes esotéricos u ocultos.
Para los que han tenido la grata experiencia de meditar; el descanso y el relax que se perciben en las sesiones, representa el eco de un beneficio todavía más profundo y fantástico que está ocurriendo en el cuerpo calloso del cerebro.
Al encontrarnos con personas que meditan permanentemente es común escuchar que han obtenido de esta práctica:
– Descanso físico y mental.
– Reduccion del estrés.
– Adaptacion al entorno.
– Percepción mejorada de la realidad.
– Aumento de la intuición.
– Mayor capacidad cognitiva.
– Autoconocimiento – Desarrollo de la conciencia. – Regulación de su campo electromagnético. – Activación Pineal. – Equilibrio y alineamiento de Chakras. – Reducción de hormonas estresantes. – Regulación del sistema nervioso simpático. – Vitalización general.
Todos estos beneficios, los cuales se pueden decir que son directos, de una u otra forma, es la persona misma la que los puede percibir o palpar en forma inmediata.
Pero existen tres indicadores externos que pueden ser fácilmente observables por terceros, de que una persona está obteniendo todos estos beneplácitos con solo meditar por 20 minutos diarios.
I. SIMULTANEIDAD DE CONCIENCIA La experta en meditación personal Emily Fletcher, menciona que, las personas que meditan tienen mayor nivel de conciencia en su entorno. Se dan cuenta de muchas cosas a la vez, mientras hacen una actividad específica. Quizá este indicador no sea tan bien percibido por terceros en el momento, pero es el que da pie al siguiente. Tener simultaneidad de conciencia, hace a los seres más amorosos, compasivos, sensibles ante las circunstancias que sabe que están mal. Les permite concebir y percibir la existencia de un Universo inmaterial todavía más basto que el material, pero complementario con este.
II. DETECCIÓN DE SUTILEZAS Son detalles minúsculos que están en el entorno. Sólo cuando hay simultaneidad de conciencia, se puede obtener este indicador. Puede darse como una fineza para percibir detalles en las personas, que hace que se obtenga valiosa información sobre cada uno. La detección de sutilezas supone de una mente adaptada a las circunstancias. Es posible mediante este indicador, reconocer los estados de ánimo de una persona con sólo ver sus gesticulaciones, darle un apretón de manos o visualizar su mirada en su conjunto.
III. DETECCIÓN DE PATRONES Un meditante permanente observa patrones, o moldes en todo su entorno. Esto le permite llegar a una comprensión de causa y efecto de todo cuanto le ocurre. Dan certeza sobre las causas de fenómenos en las personas de su entorno y se les es muy factible comprender aquello que para los demás es complicado. Con la detección de patrones, el meditador puede incluso; predecir muchas cosas, como el comportamiento de las personas, los animales y el entorno. Puede descifrar el por qué de los eventos que ocurren y establecer una relación clara entre causa y efecto. Así que; cuando te topes con una persona que reúna estas tres características, sin duda sabrás que es un meditador y podrás sin duda, pedirle que comparta su experiencia contigo, para animarte a seguir el sendero meditativo. Estos tres indicadores se confabulan como beneficios indirectos de la meditación y pueden ser adquiridos con tan solo 12 semanas de estar practicando diariamente. Que sea el sendero de la meditación, la vía que te lleve a la plenitud de tu Ser en este espacio dimensional.
César Ramírez
NUESTRO TRABAJO ESPIRITUAL
Nuestras experiencias en esta vida no son más que un capítulo del libro de la vida.
Simplemente no podemos juzgar o ver la imagen completa de nuestra historia de vida desde la perspectiva de una sola vida, no importa lo que parezca, siempre habrá un buen karma que traemos que tenemos que redimir.
No podemos escapar de esto. Afortunadamente se nos da la fuerza para afrontar cualquier reto. Nada hay que no se pueda superar o perdonar.
Se necesita coraje para mirar nuestras faltas a la cara, a través de nuestras muchas encarnaciones, hemos hecho cosas grandes y nobles y también cosas no tan buenas.
Todo esto es parte del proceso de crecimiento y todas estas cosas juegan un papel en el patrón de la Ley de Causa y Efecto de nuestra vida.
Si fuimos demasiado pasivos en una vida pasada, tendremos que ser más dinámicos en esta vida. Si fuimos crueles en el pasado, tendremos que mostrar bondad ahora.
Si éramos impacientes antes, tendremos que aprender a tener paciencia ahora y así sucesivamente. La Ley que es Dios y es Amor es sólo un educador, no un castigador. En la naturaleza no hay castigo deliberado o recompensa.
Sólo manifestaciones de la energía que operan en diversos niveles. Es como el maestro compasivo, que nos recuerda que debemos leer la lección y prepararnos para la prueba.
Página. Puntos de Luz.
Marysol Cortés
¿QUÉ CLASE DE ENERGÍA TRANSMITES?
Si tú llevaras imanes pegados por todas partes, podrías esperar que algunas cosas se te pegaran, que otras se alejarán corriendo de tu lado y que otras no te afectarán.
En cierto modo, esto es lo que ocurre en la vida, inconscientemente transmites tu energía. Algunas de tus cualidades son magnéticas y otras repelentes.
Has atraído hacia ti toda cosa y persona que está en tu vida. La vibración que emites está formada por tu energía consciente e inconsciente, en parte repelente, en parte magnética, y en parte neutra.
La ley que hay detrás de ello es la que dice: «Atraemos lo que es similar a nosotros». Atraemos a nuestra vida, personas y situaciones que tienen vibraciones similares a las nuestras.
Las cualidades negativas como la penuria, la desesperación, la depresión, la rudeza o la desconsideración conducen a una frecuencia baja. Si poseemos alguno de estos elementos en nuestra naturaleza, magnetizaremos a alguien de energía similar hacia nuestra vida.
Las cualidades como el amor, la gentileza, la dicha, el deleite o la generosidad transmiten una energía de frecuencia elevada y también magnetizan a personas de energía similar. El universo nos ofrece espejos para que nos contemplemos en ellos, mira a tu alrededor y observa a los personajes que te rodean.
Están interpretando un papel en la obra de tu vida por algún motivo. Cuanto más vehementemente negamos que somos como imanes para cierto tipo de persona o situación, más nos pide nuestro Yo superior que observemos atentamente a nuestra sombra.
La desesperación es algo que repele. Cuando alguien está desesperado por tener pareja, los demás captan esa desesperación a un nivel sutil y se retiran. Cuando cambian esa energía por otra amorosa, abierta y de aceptación, atraen a la persona adecuada. La ley de atracción funciona en diferentes ámbitos.
Si no estás en armonía con la vida puedes atraer alimentos que te sientan mal. Si tienes pensamientos autocríticos te estás atacando a ti mismo. Puedes atraer a mosquitos que te piquen. Están sirviendo de espejo para la energía que estás emitiendo. Si estás soterrando la cólera puedes atraer un ataque. Si tienes pensamientos negativos atraes a personas y situaciones negativas. Si tienes mala salud, en el momento en que estés listo para soltarla atraerás al sanador perfecto a tu vida. Si quieres que un proyecto tenga éxito pero tienes sentimientos ocultos de aburrimiento, o si estás asustado o cansado, la energía subyacente contrarrestará el éxito del proyecto.
Siempre que algo no se manifieste como tú esperas, examina tus sentimientos ocultos y cámbialos. Entonces magnetiza aquello que quieres. Lo interior atrae a lo exterior. Si algo de tu mundo exterior no es como quieres que sea, busca dentro y cambia tu manera de sentir con respecto a ti mismo. Entonces automáticamente atraerás a personas y experiencias diferentes hacia ti. Si te infravaloras y piensas que no eres lo suficientemente bueno, atraerás a una persona abusiva que te hará lo mismo. Recuérdate tus buenas cualidades y magnetiza a alguien que te aprecie. No emitas energía negativa ni pienses en atraer algún desastre hacia ti. Irradia luz positiva y confía en que un milagro se acerque a ti. Eres como un imán: atraes aquello que es similar a ti. NAMASTÉ










