

El cuello me dolía mucho…
…Entonces, dejé de usar ropa apretada, cambié de silla, compré fajas ortopédicas, fui con médicos de todo tipo, pero el dolor seguía, un peso, una carga, una molestia que no me dejaba ni dormir y a veces, hasta me costaba respirar…
– Y?? Qué hiciste???
– Una sabia mujer… me dijo que era porque cargaba demasiado desde hace mucho. – Y…Cómo supo eso??
– Sólo con mirar mi columna tensa y comprimida, sólo con sentir con su tacto de manos viejas y ajadas mi piel desnuda ella supo…
– Y?? Qué te dijo??? – Dijo… «Tantas presiones haz cargado con los años, tanto dolor y rencor que haz perdido la cuenta, cargas el peso del mundo propio y del ajeno»… Y entonces , entonces yo exhalé todo el aliento que llevaba reteniendo desde hacía más de dos décadas…
– Te dijo cómo curarte??
– Ella tomó mis manos en las suyas, en esas manos de anciana, me hizo bajar las manos, soltar los hombros, me levantó el mentón y se paró detrás mío.
Sus labios rozaron mi oído y suavemente me dijo: «No todo es tu culpa… No todo es tu responsabilidad… No puedes hacerlo todo… No puedes solucionarlo todo… No tienes que aceptarlo todo»… –
Y, que pasó?
– Y mis ojos empezaron a soltar lágrimas gruesas como cristales rotos, hubo un momento donde pensé que lloraría sangre, de tanto dolor que estaba sintiendo. Poco a poco mis hombros regresaron a su sitio, mi cuello se puso suave y se levantó nuevamente, mi espalda se irguió como hacía años no sucedía y escuché mis huesos emitir un crujido tenebroso…
El peso del mundo había descendido de mis hombros, el peso de los dolores del pasado había por fin bajado al piso e iba a ser usado como escalón… – Te dijo algo más???
– Sus ojos lobunos me miraron expectantes y dijo : » Hay dolores que se cargan en el corazón y esos, no hay manera de sacarlos fácilmente… Aprende a soltar el pasado o terminarás ahogando tu futuro… Y también comprende que la falta de perdón no lastima más que a aquel que no puede perdonar»…
Luz para tu alma… Créditos al autor.
Suelto y libero todo apego negativo.
Suelto y libero falsas creencias.
Suelto y libero memorias que me limitan.
Suelto y libero la frustración.
Suelto y libero la idea de complacer a los demás.
Suelto y libero la necesidad de tener la razón.
Suelto y libero la ira.
Suelto y libero el temor a avanzar.
Suelto y libero el estancamiento en todas mis áreas.
Suelto y libero memorias dolorosas.
Suelto y libero la creencia de que existe la enfermedad. Suelto y libero mi zona de confort.
Suelto y libero el resentimiento.
Suelto y libero el orgullo.
Suelto y libero programaciones heredadas de mis ancestros.
Suelto y libero a mi pasado.
Suelto y libero las preocupaciones.
Confío en mí, se que todo es maravilloso.
Confío en que todo está y estará mejor.
Confío en que tengo salud, abundancia y mucha prosperidad.
Confío en las decisiones de mi ser superior.
Confío en mis propias decisiones.
Confío en mi misma y en mi poderoso poder llamado Amor.
ES
Confiar y Fluir con la Vida
Es disfrutar a plenitud y hacer de cada momento del día de HOY algo inolvidable y único.
Confiar en nuestra alma es tener la certeza de que la divinidad en mi me guía a mi mayor bien.
Que la Alegría y entusiasmo por la vida sea mayor que cualquier miedo, duda, inseguridad e incertidumbre que en nosotros sólo los pensamientos y sentimientos de alta vibración se expandan para hacernos confiar, disfrutar, vivir y ser felices porque tenemos motivos suficientes en la vida.
Vivir en certeza de que todo es perfecto y tiene que ser como es para nuestro crecimiento y nuestro mayor bien es estar en sincronía con todo lo mejor, abundante y próspero en todo ámbito que hace de nuestra vida una experiencia maravillosa
D/A
Dejar la puerta abierta
Cuando uno de los miembros de la pareja deja de amar y decide alejarse, hay una persona que siente un gran dolor, y que siente el peso de la pérdida de una manera diferente.
Esta persona es la que sigue amando, la que no puede comprender o, que si bien comprende lo que sucede, no lo entiende o se niega a entenderlo.
De pronto debe asumir su vida, su pena, y elaborar el duelo. Es ahí cuando empezamos a comprender que a veces no podemos tener todo lo que queremos, y que la vida, o el mundo no era como lo imaginamos.
Soñamos con una vida en pareja, siempre sintiéndonos amados y amando, en terminar nuestra vida al lado de la persona amada, y así de sueño en sueño, un día nos despertamos ante esa realidad: Ya no nos aman, y nos llenamos de preguntas sin respuestas: ¿por qué? ¿cuándo?
Amar implica correr ese riesgo, y cuando se ama de verdad se sufre. Ante la pérdida debemos tratar de elaborar el duelo, y poco a poco lograr separarnos de lo que ya no está. Si no aprendemos a soltar, si no dejamos ir, si el apego puede más que nosotros y nos quedamos ahí atados, pegados a esos sueños, a esas fantasías, a esas ilusiones; el dolor crecerá sin parar y día a día nuestra tristeza, y nuestro sufrimiento serán los compañeros de ruta, de una ruta hacia la depresión, la falta de incentivo, y la falta de vida.
Cuesta soltar aquello que amamos, duele sentir que ya no somos amados, pero en ese dolor estamos creciendo y madurando y si aprendemos a soltar estamos dejando atrás una parte de nuestra historia y empezamos a abrirnos a lo diferente, a lo desconocido.
Dejar ir es la clave, no es fácil, no es simple, y duele. Pero la vivencia normal de una pérdida tiene que ver justamente con animarse a vivir los duelos, con permitirse padecer el dolor como parte del camino. Y digo dolor y no el sufrimiento, porque sufrir es resignarse a quedarse amorosamente apegado a la pena.
“Quiero poder abrir la mano y soltar lo que hoy ya no está, lo que hoy ya no sirve, lo que hoy no es para mí, lo que hoy no me pertenece. No quiero retenerte, no quiero que te quedes conmigo porque yo no te dejo ir. No quiero que hagas nada para quedarte más allá de lo que quieras. Mientras yo deje la puerta abierta voy a saber que estás acá porque te quieres quedar, porque si te quisieras ir, ya te habrías ido…”
Jorge Bucay
FLUYE, SUELTA Y SANA.
Cierra los ojos y pídele al Universo que con el viento se lleve todo todo lo que te duele…
Dile que estas cansado de cargar equipajes pesados que no te dejan avanzar, dile que con el agua limpie las tristezas, se lleve todo dolor , que purifique tu esencia, que con el fuego queme y transmute todos los miedos contenidos en ti, para que vueles alto, que con la tierra te regrese a tu hogar, a tu verdadero ser, a lo que realmente eres y no lo que te hicieron creer que eras.
Rompiendo las etiquetas y programaciones negativas que no te dejan crecer y despertar en conciencia, Sabiduría, paciencia, sanación, liberación, perdón, amor incondicional, respetando siempre y aprendiendo de la diferencia , sin juicios ni queriendo convencer de tu verdad, entendimiento.
Inhala lo bueno y exhala todo aquello que no te deja avanzar en tu día a día, se libre, se libre, se libre, deja ya de alimentar tus miedos, tus resentimientos, tu ego, tu orgullo, que al final solo a ti es a quien hacen daño ,el desequilibrio llamado enfermedad, todo dolor emocional, físico , mental, espiritual es opcional, tú decides cuando dejas de alimentarlos, basta ya!
Pide perdón por a veces querer más el conflicto que el amor , entrega todo lo que ya no te sirve, aprende la lección para que no se te repita y crece como un árbol fuerte frondoso , lleno de sabiduría y amor incondicional obtenida de los 4 elementos, recuperando las memorias antiguas , vive el hoy, tu primer misión en esta vida, es ser feliz..
D/A