Cada persona que viene al mundo, tiene su propio programa… Cada ser es programado antes de reencarnar en un cuerpo… Todo, absolutamente todo, es un programa perfecto…
Cuando tú vienes al mundo, vienes programado… se te ha hecho un programa dependiendo de tu evolución, de tu karma y de tus registros akáshicos…
No existe nada que no venga con su determinado programa… y cada uno de los programas individuales es perfecto y forma parte de la Ley Absoluta.
La Ley Absoluta de Recordar y Reconocerse uno a sí mismo… ésta es la Realización de la Conciencia, del Ser… Y para lograr la Realización, todos y cada uno de los seres humanos deben cumplir con su programa…
Las relaciones familiares no son casualidad… ni las relaciones de amistades, de pareja, etc… Cada persona que aparece en tu vida, comparte su propio programa con el tuyo… Nada sucede por casualidad… todo es un Plan Perfecto y Absoluto…
¿Cómo saber cuál es tu programa de vida? Escuchando a tu corazón… dejando de vivir desde la mente pensante y fluir con las experiencias que la vida te pone delante…
Cuando sabes que estás en el camino correcto, es porque estás llevando a cabo tu programa… Pero si sientes que todo es un obstáculo, no sabes porqué estás aquí, no sabes cuál es tu misión, entonces, simplemente deja de vivir desde la mente y escucha a tu corazón…
Tu corazón te dice constantemente, si estás en el camino correcto o no… Cuando sientas paz en tu interior, sabrás que estás en donde debes estar… Y no te preocupes por tu programa, todo sucede por sí mismo… solo hay que permitir que suceda… dejando de poner resistencias, dejando las luchas internas… comprendiendo y aceptando que todo, absolutamente todo forma parte de tu programa de vida… y por tanto, te ayudará a impulsar tu conciencia para la Realización de Tí Mismo.
Y una vez hayas logrado la Realización, te liberarás del Samsara… te liberarás del karma para volar libre en el vacío… y si deseas volver, será por tu propia voluntad… Volverás como voluntario, con otro programa de vida… el cual, conllevará una gran responsabilidad.
Camino del Despertar
