LA UNIDAD QUE NOS ESPERA
La conciencia de Unidad sólo puede materializarse en la vibración de la quinta dimensión, por corazones que se aman unos a otros, y los corazones pueden amarse unos a otros, sólo cuando, primero, se aman a sí mismos.
“Sólo en un mundo donde puedas, por intención consciente, permitir que cada pensamiento, palabra y acción manifieste amor, confianza, Gracia Divina, fe, compasión y gratitud, que existe incondicionalmente dentro de ti, alcanzarás la quinta dimensión”.
Es nuestro trabajo preparar nuestros corazones para que se conviertan en la Tierra Sagrada sobre la que pronto pisaremos. Primero debemos recibir nuestra propia bienvenida a casa antes de poder mostrar a otros el camino hacia su objetivo.
La mente no puede entender estos cambios, pero el corazón sí. Quién eres, lo que reconoces como eres, cambiará exponencialmente, con Gracia y poder sin precedentes, cuando reconozcas estas verdades. Estas nuevas perspectivas activarán las cuerdas del ADN, que han permanecido latentes, esperando el momento presente.
Cada cadena de ADN humano está destinada a desarrollar el cuerpo físico muy rápidamente, basándose en mutaciones de la conciencia.
