

Al comparar tu camino de vida con el de otros puedes sentir que el tuyo no va por donde debe ir.
Por una parte, está bien escuchar esa voz que te indica que es tiempo de moverte, de renovarte.
Y al mismo tiempo sigue recordando, valorando lo que ya tienes andado y forma parte de tu vida.

Y lo mucho que te costó ponerte en pie otra vez, y, sin embargo, lo hiciste.
Agradecer a la gente hermosa que hoy te rodea y ama, y a la que puedes amar.



Elena Sánchez